Historia
La enseñanza no se puede improvisarLa enseñanza no se puede improvisar. Por eso es mucho más fiable hacer una enseñanza con una base sólida y 43 años a la espalda lo es. La primera escuela legalizada sindicalmente se montó en Palma en 1963, en las Galerías Olmos.
María llevaba el salón y José la escuela. En el año 65 se celebró en Barcelona “El Quijote de Oro”, siendo los únicos participantes de las Islas Baleares, conectando con muchos profesionales de gran talla.
La Casa Henry Colomer, con el Sr. Camps al frente, homenajearon a “María y José” a su llegada a Palma, donde presentaron la línea lanzada en Barcelona de nombre “Dulcinea”.
“María y José” no escatimaron en esfuerzos para darles a sus alumnos las últimas tendencias y técnicas por eso realizaron infinidad de viajes a Londres donde “José” asistía a ateliers, demostraciones y galas.
En la Escuela Politécnica de Palma, bajo la dirección del coordinador Sr. Tais, se realizaban los exámenes a nivel de Gremio y “José” formó parte del jurado varios años consecutivos.
En el año 1972, se empezó a reglar y reconocer la enseñanza por el Ministerio de Educación y Ciencia, entonces se exigían exámenes para Maestro Industrial y al ser obligatorio “María y José” obtuvo la titulación exigida.